domingo, 28 de agosto de 2005

La ternura

No es ternura el fuego de una pasión, sino la suavidad de una caricia.
No es ternura el oleaje que desborda, sino el beso del cielo con el mar.
No es ternura la montaña de nos sobrecoge sino la maceta de violetas perfumadas en la ventana.
No es ternura lo grandioso, sino la delicadeza, la insignificancia, el detalle.
No es ternura lo que se da, sino lo que se refleja y se deja traslucir.
No es ternura el sol que calcina, sino la luna que embruja.
No es ternura el fuego que abraza, sino el leño que se consume.
No es ternura lo que sobresale y resalta, sino el escondite, el beso, la insinuación, la luz y la rosa.
La ternura parece por momentos olvidada y tendríamos que revivirla pues es lo que logra que nuestros días, nuestra vida pase de ser un mero transitar a ser inolvidable.
La ternura está en aquello que parece pequeño pero que se hace grande en el corazón.
El beso sincero, el apretón cálido de manos, el abrazo inesperado, una mirada llena de amor que nos dice.... "estoy con vos aca, podés contar conmigo", unas pocas palabras en un papel que dicen todo.
En los niños vemos la ternura todos los días.
Nos cautivan con sus expreiones sinceras, con la caricia que llega a nosotros sin tener que hacer ningún reclamo.
En el beso, en el abrazo cortito que no puede envolvernos, pero que nos hace sentir ese corazoncito muy cerca de nosotros.
Hemos crecido, somos adultos, dejamos muchas cosas olvidadas o, de tanto golpearnos, quedaron en nuestro interior adormecidas, paralizadas, congeladas.
Intentemos revivirlas.
La ternura no está en lo grande, ni en lo brillante, ni en lo que se destaca, está en lo chiquito, en lo sencillo, en esas pequeñas cosas de todos los días.
La ternura es eso que vitaliza al anciano, durme al niño, y desarma al hombre!.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Ternura es abrir el corazón para amar y que nos amen, es el perfume del mundo, es el amanecer esplendoroso, es la delicadeza de un instante que posa una mirada, es el regazo que acuna a su hijo. Es la vida diaria, eso es termura. Y si eres tierna le ganas a todo lo malo.

Heidi
Sgo del Estero