lunes, 27 de noviembre de 2006

Qué pasaría si un día despertamos?

Que pasaria si despertamos dándonos cuenta de que somos mayoría?
¿Qué pasaría si de pronto una injusticia, solo una, es repudiada por todos, todos que somos todos, no unos, no algunos, sino todos?
¿Qué pasaría si en vez de seguir divididos nos multiplicamos, nos sumamos y restamos al enemigo que interrumpe nuestro paso?
¿Qué pasaría si nos organizáramos y al mismo tiempo enfrentáramos sin armas, en silencio, en multitudes, en millones de miradas la cara de los opresores, sin vivas, sin aplausos, sin sonrisas, sin palmadas en los hombros, sin cánticos partidistas, sin cánticos?
¿Qué pasaría si yo pidiese por vos que estás tan lejos, y vos por mí que estoy tan lejos, y ambos por los otros que están muy lejos y los otros por nosotros aunque estemos lejos?
¿Qué pasaría si el grito de un continente fuese el grito de todos los continentes?
¿Qué pasaría si pusiésemos el cuerpo en vez de lamentarnos?
¿Qué pasaría si rompemos las fronteras y avanzamos, y avanzamos, y avanzamos y avanzamos?
¿Qué pasaría si quemamos todas las banderas para tener solo una, la nuestra la de todos, o mejor ninguna porque no la necesitamos?
¿Qué pasaría si de pronto dejamos de ser patriotas para ser humanos?
¿No sé... me pregunto yo, qué pasaría?
Mario Benedetti

domingo, 26 de noviembre de 2006

Tristes versos de noviembre

No niegues el beso que asoma a tu boca,
no escondas la caricia que tímida asoma en trémulo placer,
ven a mi lado que ya es noche, y en el derroche
de las ansias locas mis sábanas te sueñan a mi lado,
despiertos al amanecer...Escucha las voces dentro mío diciendo que te marchas,
sólo en tus labios irreconocidos mi alma sueña,
que volverías, que nada más mentías para enojar mi alma
y pensé en lo inútil de las despedidas, preferí quedarme con la instantánea
de tus ojos, que decían la verdad, que en mí te quedabas...
y que jamás te irías. Inventemos la ternura inolvidable de besos
al amparo del exceso de querernos y seremos la mañana
que emerge de la noche de talentos y presos, seremos nosotros,
nunca completos de querernos tanto, augurando noches de tardíos excesos
en lechos fantásticos y arrebatando a nosotros mismos
el origen del abismo de sabanas y techos.
Volverá tu risa a través de los cristales despertando la vida,
serán catedrales tus ojos en la vigilia de mirarlos y tu sonrisa,
traerá la prisa de alcanzarlos para besarlos llenos de la caricia
inmensa de tomar tu cintura, llenando mis manos del amor y la locura
de estar juntos, y soñar y atraparnos lentos,
dejando el mundo, trayendo las sales del silencio desde lo profundo,
de nosotros mismos, otra vez enamorados y tiernos.
Al menos esta noche ignoraré el dolor, cuando la flor
de tu pecho se abra en mis manos, tentando al arcano
de caricias esperadas y sábanas de olores inconfundibles y tangibles
que hablan del sol de tu risa y mi prisa por tenerte,
para deshojar en mí tu ternura y tu amor.
Haré de tus lágrimas aliento, haré del viento la sonrisa que tanto extraño,
haré de estos años un sólo y sagrado momento,
cuando mi techo cobije tu figura de mujer esperada sin remordimientos,
cuando tu boca devore la mía con música de besos, cuando preso
en tus entrañas madure la extraña sensación de alegría después de querernos...
todo eso: si vuelves.

El Huron

jueves, 23 de noviembre de 2006

Pertenecer

me interesa amarte como te amo;
me conviene este lugar
porque desde aquí puedo amarte;
no me pidas que te pertenezca,
ni pertenecerme,
porque he nacido libre
y así puedo amarte,
...e interesarme
y convenir con vos este amor

Rocco

miércoles, 22 de noviembre de 2006

Tal vez

Tal vez yo voy a envejecer muy rápido.
Pero lucharé para que el día haya valido la pena.
Tal vez sufra innumerables desilusiones en el transcurso de mi vida.
Pero haré que ellas pierdan la importancia delante de los gestos de amor que encontré.
Tal vez yo no tenga la fuerza para realizar todas mis ideas.
Pero jamás me consideraré un derrotado.
Tal vez en algún instante yo sufra una terrible caída.
Pero no me quedaré mucho tiempo mirando el suelo.
Tal vez un día el sol deje de brillar.
Pero entonces iré a bañarme en la lluvia.
Tal vez un día yo sufra alguna injusticia.
Pero jamás iré a asumir el papel de víctima.
Tal vez yo tenga que enfrentarme con algunos enemigos.
Pero tendré la humildad para aceptar las manos que se extendieron hacia mi.
Tal vez en una de esas noches frías yo derrame muchas lágrimas.
Pero jamás tendré vergüenza por ese gesto.
Tal vez yo sea engañado muchas veces.
Pero no dejaré de creer que en algún lugar alguien merece mi confianza.
Tal vez con el tiempo yo reconozca que cometí muchos errores.
Pero no desistiré de seguir recorriendo mi camino.
Tal vez con el transcurrir de los años yo pierda grandes amigos.
Pero aprenderé que aquellos que son mis verdaderos amigos jamás estarán perdidos.
Tal vez algunas personas quieran mi mal.
Pero yo continuaré plantando las semillas de fraternidad por donde yo pase.
Tal vez yo me quede triste al percibir que no consigo seguir el ritmo de la música.
Pero entonces haré que la música siga el compás de mis pasos.
Tal vez yo nunca consiga ver un arco iris.
Pero aprenderé a diseñar uno aunque sea dentro de mi corazón.
Tal vez hoy me sienta débil. Pero mañana recomenzaré, aunque sea de manera diferente.
Tal vez yo nunca aprenda todas las lecciones necesarias.
Pero tendré en la conciencia que las verdaderas enseñanzas ya están grabadas en mi interior.
Tal vez yo me deprima por no saber la letra de aquella canción. Pero estaré feliz con las otras capacidades que si poseo.
Tal vez no tenga motivos para grandes conmemoraciones. Pero no dejaré de alegrarme con las grandes conquistas.
Tal vez la voluntad de abandonar todo se torne mi compañera. Pero en vez de huir, correré detrás de lo que deseo.
Tal vez yo no sea exactamente quien me gustaría ser. Pero pasaré a admirar a quien soy.
Porque al final sabré que, asimismo con incontables dudas, soy capaz de construir una vida mejor.
Y si todavía no me convencí de esto, es por que creo en el dicho "todavía no llegó el fin".
Porque al final no habrá ningún "tal vez" y sí la certeza de que mi vida valió la pena y yo hice lo mejor que podía."

Aristóteles Onassis

martes, 21 de noviembre de 2006

Hay un niño en la calle

A esta hora, exactamente,
hay un niño en la calle.

Le digo amor, me digo, recuerdo que yo andaba
con las primeras luces de mi sangre, vendiendo
una oscura vergüenza, la historia, el tiempo,
diarios,
porque es cuando recuerdo también las presidencias,
urgentes abogados, conservadores, asco,
cuando subo a la vida juntando la inocencia,
mi niñez triturada por escasos centavos,
por la cantidad mínima de pagar la estadía
como un vagón de carga
y saber que a esta hora mi madre está esperando,
quiero decir, la madre del niño innumerable
que sale y nos pregunta con su rostro de madre:
¿qué han hecho de la vida?
¿dónde pondré la sangre,?
¿qué haré‚ con mi semilla si hay un niño en la calle?

Es honra de los hombres proteger lo que crece,
cuidar que no haya infancia dispersa por las calles,
evitar que naufrague su corazón de barco,
su increíble aventura de pan y chocolate,
transitar sus países de bandidos y tesoros
poniéndole una estrella en el sitio del hambre,
de otro modo es inútil ensayar en la tierra
la alegría y el canto,
de otro modo es absurdo
porque de nada vale si hay un niño en la calle.

Dónde andarán los niños que venían conmigo
ganándose la vida por los cuatro costados,
porque en este camino de lo hostil ferozmente
cayó el Toto de frente con su poquita sangre,
con sus ropas de fe, su dolor a pedazos
y ahora necesito saber cuáles sonríen
mi canción necesita saber si se han salvado,
porque sino es inútil mi juventud de música
y ha de dolerme mucho la primavera este año.
Importan dos maneras de concebir el mundo,
Una, salvarse solo,
arrojar ciegamente los demás de la balsa
y la otra,
un destino de salvarse con todos,
comprometer la vida hasta el último naufrago,
no dormir esta noche si hay un niño en la calle.

Exactamente ahora, si llueve en las ciudades,
si desciende la niebla como un sapo del aire
y el viento no es ninguna canción en las ventanas,
no debe andar el mundo con el amor descalzo
enarbolando un diario como un ala en la mano,
trepándose a los trenes, canjeándonos la risa,
golpeándonos el pecho con un ala cansada,
no debe andar la vida, recién nacida, a precio,
la niñez, arriesgada a una estrecha ganancia,
porque entonces las manos son dos fardos inútiles
y el corazón, apenas una mala palabra.

Cuando uno anda en los pueblos del país
o va en trenes por su geografía de silencio,
la patria
sale a mirar al hombre con los niños desnudos
y a preguntar qué fecha corresponde a su hambre
que historia les concierne,
qué lugar en el mapa,
porque uno Norte adentro y Sur adentro encuentre
la espalda escandalosa de las grandes ciudades
nutriéndose de trigo, vides, cañaverales
donde el azúcar sube como un junco en el aire,
uno encuentra la gente, los jornales escasos,
una sorda tarea de madres con horarios
y padres silenciosos molidos en la fábricas,
hay días que uno andando de madrugada encuentra
la intemperie dormida con un niño en los brazos.

Y uno recuerda nombres, anécdotas, señores
que en París han bebido
por la antigua belleza de Dios, sobre la balsa
en donde han sorprendido la soledad de frente
y la índole triste del hombre solitario,
en llanto, sus señoras, tienen angustia y cambian
de amantes esta noche, de médico esta tarde,
porque el tedio que llevan ya no cabe en el mundo
y ellos son los accionistas de los niños descalzos.

Ellos han olvidado
que hay un niño en la calle,
que hay millones de niños
que viven en la calle
y multitud de niños
que crecen en la calle.

A esta hora, exactamente,
hay un niño creciendo.

Yo lo veo apretando su corazón pequeño,
mirándonos a todos con sus ojos de fábula,
viene, sube hacia el hombre acumulando cosas,
un relámpago trunco le cruza la mirada,
porque nadie protege esa vida que crece
y el amor se ha perdido
como un niño en la calle...

Armando Tejada Gómez

20 de Noviembre - Día Universal del Niño

viernes, 17 de noviembre de 2006

Aunque no tenga

El malicioso humo interpreta de manera acertada
la malhadada sombra de mi propia tristeza
que te llama ausente desde mi torpe ilusión, enamorada
reciente de este presente que no regresa y este
mar de lágrimas que nos separa, callado y custodiado fuertemente.
La malévola intención de no poder dar mis versos al aire
me circunda y me inunda de fantasmales lapiceras encantadas
y aparentemente tranquilas, pero es mi alma
la que contradice al desaire
de la inocente esperanza que me anima la prosa escondida
y me vuelve impenitente y tenaz, tal vez capaz
de quererte ausente e indefinidamente en esta o en otras vidas.
He decidido enamorarme igual, aunque no te tenga,
te nombro ahora mi dueña y viviré para ser feliz
con tus gestos no dirigidos ni vistos por mí,
en el entrevisto atardecer seré feliz
con la esperanza absoluta de la terca porfía
de algún día tenerte junto a mí, fabulosa e intensa,
en una noche inesperada:
aunque no me lo merezca.

El Hurón

miércoles, 15 de noviembre de 2006

Ansiedad

Ansia de estar un día en un puente de mando,
recibir en el rostro el castigo del viento;
sin ninguna arribada, por siempre navegando,
sin dudas ni temores, cansancio o desaliento.

Y no saber siquiera, en qué forma ni cuándo,
ha de concluir el viaje -en milagro de cuento-;
ni cuándo retornar a éste mi lecho blando,
ni a la antigua ventana, ni al dorado aposento.

Acres de sal los labios, ruda racha en la frente,
perdido el horizonte, sin destino la nave,
sin nada que la guíe, sin nadie que la oriente,
mecida por las olas, columpiada en la cresta,
apenas sobre el mástil las alas de algún ave;
sólo el rumor del mar, y Dios como respuesta.

Marilina Rébora
Argentina

martes, 14 de noviembre de 2006

Cuando

Cuando mis manos
Te encontraron, té
Sintieron.

Cuando mi boca beso
Tus labios, sintió tu
Cuello, llego a tus
Pechos y de tu amor se
Embriagaron mis
Sueños.

Y en tus caderas,
Fuego y viento me
Consumí y fui
Firmamento.

Y con mis manos,
Y con mis labios,
Y con mis ojos,
Comencé de nuevo
El viaje eterno de
Tu cuerpo y de
Mis manos, de
tu cuerpo y
de mis labios.


Ricardo Reyes

lunes, 13 de noviembre de 2006

Magia

Torrente de aguas saladas
inundan mis arenas,
olas que pujan haciendo hueco
unen distancias,
crean imágenes;
cuerpos esbozados
estallan salpicando sus encuentros
y nace la maternidad del Universo.

Heidi Rótulo de Arnedo

domingo, 12 de noviembre de 2006

Despedida

No cambiaré el camino de mis ojos
por más que lo pidan tus lagrimas saladas,
antes la nada de no tenerte que pretenderte
lejana y fría,
sobradas muestras de dolor ha dejado en mí
la porfía de esta cicatriz punzante de eternas despedidas...
como para pretender cabalgar la húmeda geografía
de besarnos impasibles...
como si el mundo no existiera
y el imposible de la vida alcanzara son solo abrazarnos,
haremos un maldito paraíso del bendito
infierno de tocarnos, y resucitaremos el sueño de pieles nocturnas
con solo soñarnos...inocentes y lánguidos.
Vendrás con esta lluvia y otras más,
estarás en mi mente de recuerdos ausentes,
anhelando la paz de tu cintura, con la segura
bienvenida del agua que no cesa y rondaras mi cabeza,
como entonces, en el bronce
eterno de mis manos que extrañan tu belleza...
Irónicas voces me dicen que te deje, que me aleje
ahora de la hora de tus besos
pero preso sigo de tu recuerdo incierto
y pretendido de que vuelvas,
pero en esta selva me siento libre y cautivo,
por eso sigo,
detrás de los barrotes de pretender tu presencia.
Tarde o temprano,
alborotarás mis ojos con la luz de tu ausencia,
desbaratarás de ciencia mis antojos de tristeza
y en la noche que empieza,
pondrás telón de besos al embeleso
mágico de mirarte cuando duermas...

el huron

viernes, 10 de noviembre de 2006

Qué tiras al agua?

Dime . . . ¿Que tiras al agua?
un púbico desconsuelo y una secreta esperanza
lágrimas que no son mías, recuerdos y madrugadas
remordimientos antiguos, palabras, muchas palabras
que por dichas no conviene recordarlas . . .

Y tú . . .¡Que tiras al agua?
trabajos mal terminados, canciones inacabadas
nombres de malos amigos, dudas y dos o tres cartas
malamente concebidas y escritas enhoramala . . .

Dime . . . ¡Que tiras al agua?
silencios, muchos silencios, desgracias, muchas desgracias
desabridas actitudes, iras injustificadas
tiempo inútil y perdido, deudas que nunca se pagan
tristezas no comprendidas, hambres, miserias humanas
vergüenzas inconfensables, limosnas no confesadas,
consejos paternalistas, éxodos de casa en casa
y una desconsoladora sensación dentro del alma . . .

Y tú . . . ¿Que tiras al agua?
desatinos, desacuerdos, mentiras innecesarias
traiciones no cometidas, promesas no consumadas
falsos credos, diferencias, hipócritas alabanzas
prejuicios imperdonables, conclusiones temerarias
resentimientos oscuros, frases desafortunadas . . .
¡Mi vida! . . . ¡Mi vida entera!
¡Mira como se la lleva el agua

jueves, 9 de noviembre de 2006

Solamente

Solamente un beso espero o un exceso...
(con las ansias locas de palpitar tu regreso), tendrá que ser ese beso
inmenso como tu alma, que me devuelva la calma
inaudita de tu partida reciente.
Me lo darás en la frente? Me lo darás en la boca?
O se lo darás al aire que en mi corazón provoca,
un remolino tierno cuando pasas y me rozas? ay!...me rozas sin saberlo.
Que esperabas de un poeta sino la poesía?
Que te sorprende de mi vino que sabe a mis versos?
O necesitarás un esfuerzo para comprenderme todo?
Ya sabes el modo en que siento la vida...ya conoces de mi alma
que se empecina en regresar al punto de partida, cuando ensimismada y herida, tus ojos le hablan y codo a codo,
se curan en la miel de tus palabras
la triste sal en el primer aliento de tu última partida.
Que esperabas de mis versos sino lágrimas de papel confuso?
Que pretendías de mis letras sino el obtuso
sentimiento indefenso? O llamabas al intenso
estertor que todo lo sacude?
No, no serán esas nubes las que ocultan mi cielo...
sino los celos por tus besos perdidos...
el ido peregrinar de tu angustioso olvido
que en esta noche no me deja amar...
solamente le permiten llorar todo lo nuestro...
todo lo perdido !

el huron

martes, 7 de noviembre de 2006

Ojos

Ojos de sol.
Labios de mar.

Pechos de estrellas.

Dedos de pétalos.

Centellas y cometas
Que pasan, me la
Recuerdan siempre.

Me dejan ciego y
Me hacen verla.

Centellas y cometas
Hechos de ella, de
Su luz, de su belleza.

Pechos de estrellas,
Dedos de pétalos.

Ricardo Reyes

lunes, 6 de noviembre de 2006

Te observo


Entrelazando sentimientos
te pude observar
con sentido y sin sentido
en tu mundo resides
intentando olvidar.
Piensas que tu futuro
podría ser mucho mejor
sino hubieras confundido tu camino
todo brillaría más que el sol.

Pero se te escapa el tiempo
no pudiéndolo recuperar
ese tiempo de antaño dulce,
ese…, no volverá
Pero mira muy alto amigo
nada ni nadie te puede parar
no hay un fin si no quieres
así…, que hecha a volar.

Que aun es largo el camino
que nos queda por sembrar…,
Entre amapolas hermosas
rosas frescas cuajadas de pasión
o entre esas espinas dolorosas
que a veces entran en el corazón.

Pero sean hirientes o no
nada apagara nuestra voz
tan solo sembrara la simiente
esa que llevamos con amor.
La de saber verdadero significado
de la sensibilidad y la pasión.

domingo, 5 de noviembre de 2006

Unica

Pesadilla de alcoba,
te transformaré en pájaro que anidó fugaz
en mis heladas sienes y partió dejando en la tarde
esperanzadas lágrimas debajo de mi almohada.
Que aún mantiene, mi pasión en ciernes
y que me pregunta por tu boca y mi boca:...
no le responde nada.
Sueño de misterio, vacío de amor amante,
profecía de pasión inalcanzable, se fueron tus cabellos
confundidos con el viento a las llanuras, aquellas llanuras
que jamás me atreveré a pisar, al desierto más desierto
que jamás podré siquiera imaginar, y a lidiar:
mi inteligencia, contra el temido rival de tu hermosura...
Pecaremos...si eso me preguntas,
dejaremos expectantes en la punta
del ovillo aquel sencillo amor, al que nada lo asusta,
prometo ser tu amante si eso es tan sólo
lo que esta noche tu miedo trasunta,
esperando tu imagen...como a ti te gusta.
Permíteme un momento, mujer de cristal desconocido,
que penetre en tu olvido y haga trizas tus lamentos,
déjame el intento de llegar hasta tus labios,
para desterrar agravios y enamorarte esta tarde
aunque mañana ni siquiera te acuerdes de mí...
ni de mis besos.
Regresarás. con el perfil intacto
de una mujer desconocida, con la temida
sinrazón de esta pasión que apareció en el costado
de mis años tranquilos, para tenerme en vilo,
para dejarme enamorado y sediento, de tus ojos,
de tus manos...de tus desconocidos pechos...

El Hurón

viernes, 3 de noviembre de 2006

Perdón por amarte

Por amarte no dejo de mirarte
pienso en vos a cada instante,
a veces puedo llegar a cansarte,
porque no puedo dejar de amarte.

Por esta sencilla pero profunda razon,
te entregué todo,
sólo por amor,
por amarte simplemente
te entregue mi corazón.

Dejar de amarte nunca podría,
sería como dejar morir parte de mí
sacrificar este amor me mataría,
porque sin vos no puedo vivir.

Las palabras más dulces me inspiras,
mi amor brota con cada suspiro,
se que quizás te arte,
pero todo esto sólo es por amarte.

Cambio mi vida, mi alma,
por a tu lado pasar mis últimos momentos,
pero si de aquel lado todo continúa,
con la misma pasión te seguiría amando.

Podría escribir millones de hojas,
simplemente con un te amo,
podría estar toda mi vida diciéndotelo.
Por eso hoy quería pedirte que me entiendas.
Por eso hoy quería pedirte perdón por amarte.

Alelí

jueves, 2 de noviembre de 2006

Me dejas pasar amor ?

Tiembla ya mi puerta;
arde el eje de la tierra como un sol;
arde a llamaradas la hoguera;
!reflejo mismo de mi pasión!.
Tiemblan ya mis piernas;
arde mi corazón,
y ella solo a gritos desde afuera;
dice: "Me dejas pasar amor?"

Rodrigo Matías Díaz

miércoles, 1 de noviembre de 2006

Las lagrimas de una madre

Las lágrimas de una madre,
son un collar de perlas,
una a una que se cuenta
tiene un valor incalculable.

Las primeras son de alegría
al escuchar en su vientre,
los latidos de un ser viviente
que viene a cambiar su vida.

Luego vienen las de miedo,
si se cae, o se enferma,
ay, Señor, que no lo pierda
y lo socorre en su seno.

Sigue el miedo adolescente,
los amigos, las juergas,
que las notas de la escuela,
de todo ella está pendiente.

Se despiden hacia horizontes,
donde tal vez son inciertos,
son estudios, son las guerras,
o tal vez sientan presiones.

Siguen las perlas menguando,
una boda, un regalo,
un fruto de un amor,
que resulta tan amado
como el mismo que parió.

Y entonces con el tiempo,
son los años el castigo
si la descuidan los hijos
son lágrimas en silencio
y en silencio dan sus gritos.

Son las últimas perlas,
las que se desprenden solas,
ya no hay fuerza, al cielo implora,
que la guarde bajo tierra.

Y cuando el collar se rompa,
y las perlas estén muertas,
verás oculta una sombra, será ella...
que vigila y siempre llora...

Carmen Flores