jueves, 3 de noviembre de 2005

Ausencia de tus pequeños pies

Hoy no te he visto. Te he buscado:
en los estantes, en la mesa acostumbrada de horas
pensantes. Confundido y asustado.
Como un niño: te he buscado.
Imaginé a cada instante tu pequeña figura
atravesar la puerta, como siempre,
como cada tarde, como cada noche
con tus ojos negros, alertas y chispeantes.
Pero no has venido.
Y a quien se lo digo:
A mi alma trashumante?
A los colores robados por tu ausencia?
A la sempiterna paciencia
de esperarte?...no vuelvas a hacerlo.
Creo que el corredor de esperarte
se llena de lágrimas y el irrisorio hecho
de haberme enamorado,
perdonará el pecado de que no hayas venido:
aunque estos sean los últimos versos que te escribo...
y tú...serás en mis oídos, una música constante.

El Huron

1 comentario:

Anónimo dijo...

El Hurón: Tus poesías tienen el imán de la magia que, sólo, existe en quién ama con el alma.


Heidi
Sgo del Estero