domingo, 25 de diciembre de 2005

Un Papa Noel Diferente

Quedé esperando que Papá Noel bajara por la chimenea, me acurruqué para que no me viera. De pronto vi que salía una nebulosa que iba tomando la forma de Papá Noel, lánguido, sus ojos eran dos estrellas, su voz tenue y cariñosa.

- No te asustes soy papá Noel.
- Encantada, ¿qué me trajiste de regalo?
- Traje una bolsita de ternura, una caja de sonrisas, un paquete de amor y otro de sueños.
- ¡ Qué bueno, no sabía que esas virtudes podían ser empaquetadas y regalarse!
- Sí que se puede cuando la esperanza existe en el corazón, es tan fácil tener lo que te ofrezco. Todo está en ti.
- Los paquetes sólo llevan la magia que nunca debe faltarle a la vida.
- Sólo debes creer.

Heidi Rótulo de Arnedo
19 / 12 / 2004

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Es lo que necesitamos UN PAPÄ NOEL DIFERENTE y que la magia nos llegue a todos.
Te felicito, es un hermoso cuento.


Un lector.

Andrea Somosa dijo...

Porque aun creo, tengo esperanza que mis sueños pueden cumplirse. Ojala pueda pedir menos y regalar mas...
Gracias Heidi por tu cuento, es precioso!