domingo, 24 de septiembre de 2006

Para cuando vengas

Si vieras el mundo que tengo construido
tan sólo quisiera que estemos los dos
rodeados de plantas y flores hermosas
para ser dichosos y mirándonos.

Espero que puedas venir hasta el campo
rodeado de musgos y flores de azar
con miles de tonos a los cuatro vientos
y espesos sauzales de grave verdor

Y tengo esperando para cuando vengas
un faisán de cielo y un gallo cantor
un gorrión de bronce y un pato pintón
para que te encantes viviéndolo tú.

Además te esperan una servidumbre
que andará tras tuyo todo el día y más
lustrando tus trenzas, tu cara cuidando
y dándote el agua que quieras beber.

Te espero dichoso, si decides ven,
los brazos abiertos estaré yo aquí.
Tu sabes, lo sabes, cuánto yo te quiero
ven preciosa niña, no ocultes tu ser.

Mañana te espero... Qué llegue mi ruego.
Entonces andaremos gozando doquier.
Y sino sucede porque el mundo es mundo
moriré esperando tu esquivo querer.

Hugo Izaguirre

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡Que hermoso leer que un hombre sea tan tierno y sepa decir con tanto amor algo tan esperado!


Heidi