El ocaso mece tu deseo,
la noche abriga tu encuentro,
las sábanas inunda ardiente
tu amada.
Invade tu cuerpo cual alquimia
Y tu mente desborda
en orgasmos destellantes.
Ella se diluye en el amanecer
acunando tu sueño.
Heidi Rótulo de Arnedo
Sgo. del Estero
miércoles, 13 de septiembre de 2006
Amante Virtual
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario