Me cruzaran tus besos de madrugada etérea, en la etérea despedida de noches de placeres escondidos y aún dormido, daré la vuelta buscando tu boca, con las locas ganas de tenerte siempre, aún ausente, en los pliegues de las sábanas del olvido, cuando doble la esquina de mis noches porfiadas de tu encanto, disimulando el llanto de tu despedida, extrañando la pasada alegría de aquellos besos robados al suplicio de no vernos, y se me antoja un infierno no estar a tu lado.
Entonces imagino tu figura, aquí a mi costado, amante de premuras, y el camino se hace la futura música de un sueño acariciado y sutil, con el perfil amado de noches de caricias y de cuerpos cansados. Irónicas voces me dicen que te deje, que me aleje ahora de la hora de tus besos pero preso sigo de tu recuerdo incierto y pretendido de que vuelvas, en esta selva me siento libre y cautivo, por eso sigo, anhelando tu amante presencia. Dame tu desconocida mano de misterio y rosas, y dime al oído las cosas que ya sabe el viento: que invento estar contigo en todo momento, que sólo persigo tus pasos en silencio, que muero por rozar distraído tu cabello, que sueño plebeyo conquistar tu alcoba y despierto en trovas de angustia, cuando no te tengo. Si me contestas: Haremos del vino recuerdos de pasados amores, llenaremos de flores el cántaro de la vida y no habrá despedida capaz de olvidarnos , porque habremos de quedarnos en sonrisas plagadas de besos, en el embeleso mágico de beber y abrazarnos..
Entonces imagino tu figura, aquí a mi costado, amante de premuras, y el camino se hace la futura música de un sueño acariciado y sutil, con el perfil amado de noches de caricias y de cuerpos cansados. Irónicas voces me dicen que te deje, que me aleje ahora de la hora de tus besos pero preso sigo de tu recuerdo incierto y pretendido de que vuelvas, en esta selva me siento libre y cautivo, por eso sigo, anhelando tu amante presencia. Dame tu desconocida mano de misterio y rosas, y dime al oído las cosas que ya sabe el viento: que invento estar contigo en todo momento, que sólo persigo tus pasos en silencio, que muero por rozar distraído tu cabello, que sueño plebeyo conquistar tu alcoba y despierto en trovas de angustia, cuando no te tengo. Si me contestas: Haremos del vino recuerdos de pasados amores, llenaremos de flores el cántaro de la vida y no habrá despedida capaz de olvidarnos , porque habremos de quedarnos en sonrisas plagadas de besos, en el embeleso mágico de beber y abrazarnos..
Llenaremos la copa con la felicidad de amarnos y beber callados, siéntate a mi lado y serás el cántaro agreste y consolado, de manos y de abrazos, en la cenicienta dulzura de habernos encontrado, en este vino nuevo, por nosotros inventado. No dejes que la ventana ingrávida de tu ausencia empaña de frío la ausencia y el hastío de tu ausencia me empañe los ojos vidriosos, acuoso me siento y extraño tu piel, la noche se cae incompleta de tus besos y presiento un despertar de hiel, apostando al vagabundeo inexacto de mi cariño, preso de tus besos y a la distancia: siempre fiel...
El huron
El huron
No hay comentarios.:
Publicar un comentario